Camino a otros lugares

Ha pasado ya un rato desde que abandoné un rumbo determinado y a medida que pasa el tiempo me voy dando cuenta que siempre hay algo más que descubrir incluso dentro de uno mismo...

De verdad hay que echarle una mirada al corazón, al espacio interior, al alma y los deseos.

De tanto caminar se ha quedado sin aliento mi interior, de tanto caminar se ha quedado fija la mirada hacia atrás, de tanto caminar se ha quedado congelado el corazón.

He de recordar un montón de cosas hermosas, he de recordar profundamente lo valioso de amar de aquí en adelante; al igual que un tesoro, una nobleza, una sutileza de sentir...

No lo sé, hace demasiado tiempo que mis sentimientos me engañan, me hacen dudar, me hacen llorar, me hacen odiar y querer, me hacen querer olvidar nada más que eso.

Pero finalmente, no PUEDO DEJAR DE QUERER Y AMAR.

De camino a otros lugares me encontré con esta maravilla medieval que aún logra permanecer de pie más allá del tiempo... sólo me alegré de llegar, de llegar hasta ahí, tan lejos para verlo yo misma en un día precioso, con el sol precioso sobre mí y el viento en mi cara, en mis cabellos.